En la LEGO-película diferencian entre maestros constructores (los que siguen las instrucciones), arquitectos (los que crean) y el especial, Emet, que une ambas realidades y está llamado a salvar el mundo.
En este artículo quiero explorar las diferentes formas de encarar la generación de valor en función de los recursos que contemos.
El factor tiempo y la velocidad incorporan mucha tensión a la implementación de la estrategia y es vital ser consciente de que ya no hablamos de lo mismo cuando hablamos de estrategia.
sólido Vs líquido
en un mundo «sólido» las causas y efectos son inmutables | anticiparte a lo que sucederá es un mero ejercicio de conocimiento e información y cálculo
Antaño podíamos ser cortoplacistas, pasaban menos cosas al día, el mundo era sólido y casi siempre había suficiente tiempo para reaccionar ante cambios del entorno. Muchas veces ser reactivo era la mejor opción.
Pero el mundo se hace «líquido». Todo se acelera y se convierte en una constelación de elementos complejamente interrelacionados. Cada grado de libertad adicional en cada uno de los participantes de nuestra «fiesta» incrementa lo impredecible que se hace todo: el futuro, el mañana e incluso el hoy.
en un mundo «líquido» los elementos se interrelacionan complejamente como una constelación | anticiparte sólo es posible si diseñas TÚ tu propio camino
REACCIONAR y ACCIONAR
Tenemos dos frentes abiertos. Por un lado la reacción o defensa ante los movimientos del entorno y por el otro la obligación de ser proactivos en la reinvención constante de nuestra realidad.
- Tenemos que aprender a estructurar nuestra capacidad de respuesta anticipándonos a los retosy ponderando la probabilidad de lo probable con los riesgos y las oportunidades de lo improbable.
- Tenemos que crear constantemente alternativas y gestionar esos planes B aprovechando los ladrillos que nos proporciona el camino y evitando tropezar con las piedras. La clave del éxito y supervivencia será la gestión de los planes B. (ver FACTOR K)
ACTÚA, pero con el mapa encima de la mesa!
Hoy esperar ya NO es lo más inteligente…. es muy rentable tomar las riendas y ser proactivo en un mundo de oportunidades sin fin.
Si realmente queremos llevar las riendas solamente nos queda la alternativa de mirar hacia adelante y convertirnos en gestores del futuro para ser capaces de prever los cambios en el entorno.
Con la velocidad y el cambio constante se multiplican las decisiones a tomar y necesitamos criterio para tomarlas. Siendo conscientes de que la estrategia va a tener que mutar constantemente se hace clave invertir muchos esfuerzos, tiempo y foco en conocer el mapa de los posibles caminos que podemos trazar…
estrategia es la receta para convertir tu hoy en el mañana que has decidido, y es la que va a definir qué es bueno y es malo en cada momento
Trabajar la estrategia te hará saber diferenciar entre lo que es malo y lo que es bueno, lo que son piedras a esquivar y lo que son ladrillos útiles para construir.
estructuremos nuestra respuesta ante lo improbable y gestionemos las probabilidades de lo probable
la estrategia del gazpacho
HIPÓTESIS: Imaginemos que cocinar un gazpacho es una obra faraónica y tenemos que atender a clientes hambrientos durante todo el proceso desde que decidimos cocinar la fabulosa «sopa fría de tomate» hasta que efectivamente tengamos todos los elementos para hacerlo «como Dios manda». Mientras tanto iremos organizando los pedidos de ingredientes y de todos los elementos necesarios para ello. Nos irán llegando paulatinamente.
Si tu objetivo es «cocinar» un gazpacho sabes que necesitas:
- HERRAMIENTAS: una «minipimer», un recipiente, cuchillo, cuchara, tabla de cortar, báscula, etc…
- INGREDIENTES: agua, tomate, ajo, aceite, sal, cebolla, vinagre, pimiento, pepino y pan para hacerlo, etc…
- MÉTODO: cantidades, fases y tiempos, texturas, temperaturas, etc…
La combinación de estos elementos es la receta de este objetivo, es la estrategia y tendrá que ir ajustándose y recalculándose en función de las circunstancias.
En función de las circunstancias podremos ofrecer diferentes alternativas viables a los hambrientos clientes.
Sólo podremos usar los ingredientes que tengamos efectivamente en la nevera por lo que será importante hacer previsión y anticipar con qué vamos a contar para cocinar nuestros «productos mínimos viables» que tendremos que anunciar para atraer la demanda de nuestros hambrientos clientes.
Lo ideal, por supuesto, sería contar con todos los elementos para implementar el objetivo, pero eso generalmente es una utopía. El contenido de la nevera condicionará en todo momento el abanico de platos que podremos cocinar.
contar con todos los elementos es una utopía, la nevera condicionará lo que podremos cocinar
cocinar en base a receta (JIT) o en base a nevera (NIT)
Hay dos (o 3) formas de construir con Lego y de cocinar.
- abriendo una caja que contiene todas las piezas necesarias y seguir las instrucciones (JIT)
- volcar un cajón de lleno de piezas diversas e inventar con lo que «haiga» (NIT), llámese también: VUCAte la vida.
- cualquier combinación líquida entre ambas
En un mundo en el que cada vez es menos común repetir recetas es menos rentable invertir en procesos estandarizados, «automatizados» y repetitivos para garantizar el JIT (Just in Time) de los ingredientes, para garantizar tener en el momento adecuado todos los ingredientes del producto final (la caja de LEGO).
Por otro lado es mucho más eficaz invertir en la capacidad creativa de construir con los ladrillos e ingredientes que tengamos, nos falte lo que nos falte, ya que incluso durante el proceso de obtención de las piezas puede verse alterado el objetivo.
¿abrir la nevera y que haya todo lo necesario para nuestra receta o hacer un plato con lo que haya en la nevera?
NO HAY ELECCIÓN. La mala noticia es que muy básica tiene que ser la cosa y muy estática la situación, para que podamos encontrarnos una situación en la que lleguemos a tener todos los ingredientes listos y el cliente siga aún pidiéndonos lo mismo. Normalmente nos encontramos en un malabarismo diabólico. Si en la nevera faltan cosas que no han llegado a tiempo ya no podemos esperar a que lleguen. Lo que tenemos que aprender es a tirar con lo que haya e ir trabajando para tener cada vez más ingredientes con los que construir más recetas alternativas.
El NIT(c) (not in time vs JIT) nos obliga a recalcular y genera cada vez un plan alternativo (receta alternativa) que convierta la nevera efectivamente en un abanico de ingredientes JIT (just in time) para la nueva receta. Le daremos la vuelta a la tortilla haciendo que el objetivo se adapte a los requerimientos. Es esta dimensión de liquidez en las recetas la que es la clave del éxito. El NIT por lo tanto es implícitamente un Just in Time de la estrategia que se adapta en tiempo real y forma a los recursos reales.
con el NIT (not in time) le daremos la vuelta a la tortilla haciendo que también el requerimiento se adapte a los ingredientes efectivamente disponibles.
nota: este artículo no pretende ser académico y es una provocación consciente y una patada a la ortodoxia… aquí mi gran amiga Noeliaestará tirándose de los pelos diciendo «¡¡¡sigue siendo Just in Time!!!!!»
JIT o no, raramente tenemos todo lo que necesitamos cuando lo necesitamos en un mundo líquido. Cada elemento tiene su proceso hasta llegar a la nevera.
puede pasar de todo. Puede que AMAZON se retrase y no te entregue el pepino «on time» y aún así puedas seguir con tu plan si coincide que tu cliente acepte el «error» (hay gente incluso que prefiere el gazpacho sin pepino). Si por otro lado nos fallan la cebolla y el pimiento aún podríamos salvar la situación sacándonos de la manga un sabroso salmorejo que parte de nuestro target aceptaría gustosamente… pero ¿y si no tienes tomate?… algo se te tendrá que ocurrir… ¿no? No vamos a tirar la toalla a estas alturas.
Necesitamos planes B, porque sin ellos: GAME OVER
En cada momento tenemos que sopesar los planes alternativos relativos a las combinaciones de ingredientes, método y herramientas con las que contamos y lo que nos pida o posibilite el entorno.
En un entorno en el que crecientemente no sabemos qué va a pasar lo importante es saber gestionar nuestras prioridades y ser muy consciente de lo que en cada momento nos interesa. Saber que el tomate, el aceite, el ajo y la sal son posiblemente prioridad 1 sobre la cuál podemos «pivotar» diferentes alternativas coherentes estratégicamente con nuestro objetivo de ofrecer gazpacho (como son el salmorejo, porra antequerana, arranque roteño, una simple ensalada de tomate etc etc etc) y que los demás ingredientes quizás sean ideales, pero no tan vitales es muy útil a la hora de tomas decisiones…
la realidad
El Just in Time es un concepto que proviene de la industria del automóvil es un sistema de organización de la producción para las fábricas, de origen japonés. También llamado método Toyota, permite reducir costes, especialmente de inventario de materia prima, partes para el ensamblaje, y de los productos finales. La esencia de JIT es que los suministros llegan a la fábrica, o los productos al cliente, «justo a tiempo», eso siendo poco antes de que se usen y solo en las cantidades necesarias.
Hoy día estamos viviendo un Not in Time con los suministros de chips que alteran el abanico efectivamente recibido por el comprador de vehículos.
Fernando, mi propio hermano, ha comprado recientemente un Toyota RAV4 teniendo que aceptar que muchos de los extras que quería simplemente no estaban disponibles.
El mundo está efectivamente tensando lo establecido… La carencia en «ingredientes» puede incluso suponer que en 2022 se compre un coche SIN ELEVALUNAS eléctricos en los asientos traseros.
En una urgencia o situación de catástrofe es importante saber que cuentas como alternativa última con freír unos pimientos y comértelos tú mismo si el cliente no los quiere… el caso es que… tienes que entender tus opciones y monitorizar las probabilidades de los recursos con los que necesitas contar para tu receta y MUY IMPORTANTE intentar mantener la coherencia estratégica y más aún sobrevivir.
Lo que es innegociable es la necesidad de sobrevivir a cada segundo del camino para no ver el cartel de GAME OVER.
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